jueves, 1 de noviembre de 2007
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Lo bueno de los años es curan heridas, Lo malo de los besos es que crean adición; Ayer quiso matarme la mujer de mi vida, Apretaba el gatillo... cuando se despertó.
Ahora que nos besamos tan despacio,
Ahora que aprendo bailes de salón,
Ahora que una pensión es un palacio,
Donde nunca falta espacio
Para más de un corazón...
Ahora que las floristas me saludan,
Ahora que me doctoro en lencería,
Ahora que te desnudo y me desnudas,
Y, en la estación de las dudas,
Muere un tren de cercanías...
Ahora que nos quedamos en la cama,
Lunes, martes y fiestas de guardar,
Ahora que no me acuerdo del pijama,
Ni recorto el crucigrama,
Ni me mato si te vas.
Ahora que tengo un alma
Que no tenía.
Ahora que suenan palmas
Por alegrías.
Ahora que nada es sagrado
Ni, sobre mojado,
Llueve todavía.
Ahora que hacemos olas
Por incordiar.
Ahora que está tan sola
La soledad.
Ahora que, todos los cuentos,
Parecen el cuento
De nunca empezar.
Ahora que ponnos otra y qué se debe,
Ahora que el mundo está recién pintado,
Ahora que las tormentas son tan breves
Y los duelos no se atreven
A dolernos demasiado...
Ahora que está tan lejos el olvido,
Ahora que me perfumo cada día,
Ahora que, sin saber, hemos sabido
Querernos, como es debido,
Sin querernos todavía...
Ahora que se atropellan las semanas,
Fugaces, como estrellas de bagdad,
Ahora que, casi siempre, tengo ganas
De trepar a tu ventana
Y quitarme el antifaz.
Ahora que los sentidos
Sienten sin miedo.
Ahora que me despido
Pero me quedo.
Ahora que tocan los ojos,
Que miran las bocas,
Que gritan los dedos.
Ahora que no hay vacunas
Ni letanías.
Ahora que está en la luna
La policía.
Ahora que explotan los coches,
Que sueño de noche,
Que duermo de día.
Ahora que no te escribo
Cuando me voy.
Ahora que estoy más vivo
De lo que estoy.
Ahora que nada es urgente,
Que todo es presente,
Que hay pan para hoy.
Ahora que no te pido
Lo que me das.
Ahora que no me mido
Con los demás.
Ahora que, todos los cuentos,
Parecen el cuento
De nunca empezar.
De sobra sabes
Que eres la primera
Que no miento si juro que daría
Por ti la vida entera, por ti la vida entera.
Y sinembargo un rato cada día
Ya ves
Te engañaría con cualquiera
Te cambiaría por cualquiera.
Mitad arrepentido y encantado
De haberme conocido, lo confieso
Tú que tanto has besado tú
Que me has enseñado
Sabes mejor que yo
Que hasta los huesos
Sólo calan los besos que no has dado
Los labios del pecado.
Porque una casa sin ti es una embajada
El pasillo de un tren de madrugada
Un laberinto sin luz, ni vino tinto
Un velo de alquitrán en la mirada.
Y me envenenan los besos que voy dando
Y sinembargo cuando duermo sin ti
Contigo sueño,
Y con todas si duermes a mi lado,
Y si te vas me voy por los tejados
Como un gato sin dueño
Perdido en el pañuelo de amargura
Que empaña sin marcharla tu hermosura.
No debería contarlo y sinembargo
Cuando pido la llave de un hotel
Y a medianoche encargo
Un buen champán francés
Y cena con velitas para dos
Siempre es con otra, amor, nunca contigo
Bien sabes lo que digo.
Porque una casa sin ti es una oficina
Un teléfono ardiendo en la cabina
Una palmera en el museo de cera
Un exódo de oscuras golondrinas.
Y me envenenan los besos que voy dando
Y sinembargo cuando duermo sin ti,
Contigo sueño.
Y con todas si duermes a mi lado
Y si te vas, me voy por los tejados
Como un gato sin dueño,
Perdido en el pañuelo de amargura
Que empaña sin mancharla tu hermosura.
Y cuando vuelves hay fiesta en la cocina
Y baile sin orquesta
Y ramos de rosas, con espinas
Pero dos no es igual que uno más uno
Y el lunes, al café del desayuno, vuelve la guerra fría
Y al cielo de tu boca el purgatorio
Y al dormitorio el pan de cada día.
(repite este último párrafo)
Y me envenenan los besos que voy dando.
Yo tenía un botón sin ojal, un gusano de seda,
medio par de zapatos de clown y un alma en almoneda,
una hispano olivetti con caries, un tren con retraso,
un carné del Atleti, una cara de culo de vaso.
Un colegio de pago, un compás, una mesa camilla,
una nuez, o bocado de Adán, menos una costilla,
una bici diabética, un cúmulo, un cirro, un strato,
un camello del rey Baltasar, una gata sin gato.
Mi Annie Hall, mi Gioconda, mi Wendy, las damas primero,
mi Cantinflas, mi Bola de Nieve, mis tres Mosqueteros,
mi Tintín, mi yo-yo, mi azulete, mi siete de copas,
el zaguán donde te desnudé sin quitarte la ropa.
Mi escondite, mi clave de sol, mi reloj de pulsera,
una lámpara de Alí Babá dentro de una chistera,
no sabía que la primavera duraba un segundo,
yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.
Les presento a mi abuelo bastardo, a mi esposa soltera,
al padrino que me apadrinó en la legión extranjera,
a mi hermano gemelo, patrón de la merca ambulante,
a Simbad el marino que tuvo un sobrino cantante.
Al putón de mi prima Carlota y su perro salchicha,
a mi chupa de cota de mallas contra la desdicha,
mariposas que cazan en sueños los niños con granos
cuando sueñan que abrazan a Venus de Milo sin manos.
Me libré de los tontos por ciento, del cuento del bisnes,
dando clases en una academia de cantos de cisne,
con Simón de Cirene hice un tour por el monte Calvario,
¿qué harías tú si Adelita se fuera con un comisario?
Frente al cabo de poca esperanza arrié mi bandera,
si me pierdo de vista esperadme en la lista de espera,
heredé una botella de ron de un clochard moribundo,
olvidé la lección a la vuelta de un coma profundo.
Nunca pude cantar de un tirón
la canción de las babas del mar, del relámpago en vena,
de las lágrimas para llorar cuando valga la pena,
de la página encinta en el vientre de un bloc trotamundos,
de la gota de tinta en el himno de los iracundos.
Yo quería escribir la canción más hermosa del mundo..
1 comentario:
te qieroo SABINERO ^^
entre besos y porros ((L)
qe bueeen tema!
besos ♥
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